Ahorra dinero: el desafío minimalista de 30 días

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Dondequiera que vayamos, nos bombardean con publicidad y nos alientan a consumir cada vez más. Cuando compramos, nos invade un breve sentimiento de felicidad, un hit de dopamina, que pronto desaparece y luego queremos comprar aún más. Nuestros hogares están llenos de cosas que no necesitamos y nuestras vidas se complican por la gran cantidad de posesiones que poseemos. ¿Qué pasa si, en cambio, elegimos un camino más fácil, un camino que conduzca a la libertad y la tranquilidad? Prueba el desafío minimalista durante 30 días y mira qué pasa.

¿Qué es el Reto Minimalista de 30 Días?

El desafío minimalista es un método sencillo para reducir la cantidad de desorden en el hogar, ahorrar dinero y crear más espacio para lo que realmente es importante en nuestras vidas. El concepto es simple: durante un mes, cada día te deshaces de una cosa que no necesitas . Puede ser cualquier cosa, desde ropa y libros hasta artículos más grandes, como muebles y productos electrónicos. No se trata de deshacerse de todo, sino de eliminar poco a poco el exceso y crear un hogar más organizado y armonioso.

Las reglas son las siguientes:

  • Deshazte de al menos una cosa cada día durante 30 días

  • No compres más artículos durante el desafío.

  • Vender o donar los artículos si se pueden reutilizar.

¿Qué cosas puedes elegir?

Elegir un objeto al día durante 30 días puede parecer un desafío al principio, pero hay varias maneras de convertirlo en un proceso fácil y gratificante. Primero, puedes empezar con cosas pequeñas y esperar las más grandes hasta más tarde. Recorre diferentes habitaciones de tu casa e identifica las cosas que ya no usas o necesitas. También puedes pensar en qué áreas de tu vida quieres simplificar y aclarar. Aquí hay unos ejemplos:

Ropa: Esto puede incluir ropa que ya no te queda bien o que nunca usas. Algunas prendas se pueden modificar para adaptarlas a tu estilo o venderlas para crear más espacio.

Libros y revistas: Si tienes algo que ya no lees o que no te interesa, puede que sea el momento de deshacerte de ellos. Puedes donarlos a organizaciones benéficas, o a tu biblioteca local, venderlos o regalarlos a otra persona que pueda disfrutarlos.

Electrónicos: Esto puede incluir móviles, computadores, cámaras u otros dispositivos electrónicos viejos que ya no usas. En lugar de dejar que acumulen polvo, puedes venderlos o reciclarlos de forma responsable.

Accesorios y utensilios de cocina: si tienes muchos utensilios de cocina, puede que sea el momento de hacer espacio en los cajones. Esto puede incluir desde utensilios y electrodomésticos de cocina viejos hasta vajillas y vasos que no se utilizan.

Muebles: muebles que ocupen demasiado espacio y simplemente estorben. Puedes venderlos o regalarlos.

Decoraciones y adornos: A veces acumulamos demasiados adornos que simplemente estorban cuando necesitamos desempolvar los estantes. Intenta limitarte a algunos adornos para crear más luz y apertura en tu hogar. La próxima vez que limpies la repisa, te lo agradecerás.

Equipamiento deportivo y de ocio: Bicicletas antiguas, esquís, raquetas de tenis, palos de golf. Si sabes que querrás usarlo cuando la temporada lo permita, es bueno conservar el equipo recreativo, pero si esa vieja caña de pescar ha estado almacenada intacta durante cinco años, entonces podría ser un alivio venderla.

Cosméticos y productos para el cuidado de la piel: a menudo conservamos el maquillaje y los productos para el cuidado de la piel hasta que pasan su fecha de caducidad. El maquillaje nuevo es caro, pero el maquillaje viejo puede dañar la piel. Entonces es mejor tirarlos y pensar si en realidad necesitas tantos cosméticos. Muchas veces, estas son compras que realizamos impulsivamente.

Cosas sentimentales: Las cosas de valor sentimental pueden ser importantes para nosotros, incluso si no las utilizamos. Pero cuando hay demasiados, ocupan mucho espacio. Revisa tus cosas y piensa cuáles significan más para ti y cuáles puedes eliminar. Tal vez no necesites guardar todas las tarjetas de cumpleaños, los dibujos de la escuela primaria o las entradas de cine guardadas.

Ahorrar dinero

Uno de los grandes beneficios de participar en el desafío minimalista es que no solo liberas espacio en tu hogar, sino que también puedes ganar un dinero extra vendiendo las cosas que no necesitas. Puedes vender cosas, por ejemplo, Facebook Marketplace, Ebay, o mercados de pulgas para ganar un poco de dinero y ahorrar para futuras compras. Al seguir también la regla de no comprar cosas nuevas durante el desafío, has creado una manera fácil de ahorrar dinero y al mismo tiempo simplificar tu vida diaria .

Evita el consumo excesivo

Una regla general en el desafío minimalista es evitar el consumo excesivo. No está mal comprar cosas de vez en cuando, porque habrá ocasiones en las que necesitaremos, por ejemplo, una chaqueta de invierno nueva. Pero en la sociedad actual compramos más que nunca antes en la historia de la humanidad. Por ejemplo, si querías una chaqueta nueva hace unos 100 años, acudías a una costurera que te cosía una, o la cosías tú mismo, lo cual tomaba su tiempo. Hoy en día, las chaquetas ya están en las tiendas y cuando las vemos nos invade la sensación de que simplemente tenemos que tenerlas, aunque no necesitemos una chaqueta nueva. Esto es lo que los vendedores quieren que sintamos para que compremos tanto como sea posible. Y especialmente ahora con la inflación , las compras impulsivas pueden resultar muy caras.

En lugar de realizar compras impulsivas por puro consumo, puedes centrarte en comprar sólo lo que realmente enriquece tu vida y te hace feliz. Tal vez podrías establecer la regla de que si algo entra en casa, algo también debe salir. Por ejemplo, si compras un par de pantalones nuevos, puedes deshacerte de un par que esté desgastado y tenga agujeros. Si vuelves a casa con gafas nuevas, puedes vender las viejas. O por qué no preguntarle a un amigo si quiere algunos de tus libros a cambio de algunos que no has leído.

¿Son más felices los minimalistas?

Es un error común pensar que el minimalismo se trata de vivir una vida austera sin ningún tipo de comodidad o lujo. De hecho, el minimalismo consiste en hacer espacio para lo que es realmente importante para ti y tomar decisiones conscientes sobre cómo vives tu vida. Puede ser muy placentero encontrar alegría y gratitud en lo que ya tienes, en lugar de pensar que un suéter nuevo o el último teléfono celular completarán tu vida.

Si quieres darte un capricho, piensa en lo que puede traerte alegría y buenos recuerdos. Quizás un viaje corto, una buena cena o algo tan sencillo como un picnic en el parque. Una buena inversión para gastar dinero también puede ser una máquina de coser, un curso de jardinería o algo similar, es decir, algo que te permita crear tus propias cosas en lugar de consumirlas. De esta forma, podrás sentirte más satisfecho con tu vida y experimentar menos estrés y ansiedad que aquellos que viven una vida más orientada al consumo.

Reflexiones finales

Participar en un desafío minimalista de 30 días puede ser una experiencia gratificante que te ayude a eliminar el exceso de tu vida y dejar más espacio para lo que realmente es importante para ti. Al deshacerte de una cosa al día, vender las posesiones sobrantes y evitar las compras impulsivas, no sólo podrás crear un hogar más organizado y armonioso, sino también mejorar tu presupuesto y aumentar tu calidad de vida y felicidad. Entonces, ¿por qué no intentarlo antes de finales del próximo mes, o incluso hoy?

Autor :
Emil Kjær
Emil Kjær
Gerente General

Emil utiliza su experiencia para marcar una diferencia en el sector financiero. Estudió en la Universidad de Dinamarca del Sur y ha sido gerente general de Intelligent Banker desde 2013, donde ha ayudado a más de 500.000 usuarios de todo el mundo con sus necesidades financieras.

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